lunes, 24 de enero de 2011

Compleanno... cua cua

Y 22.
Parece mentira que ya tenga 22 inviernos. Aun me parece ayer cuando todavía vivía en la calle General Mola y celebré allí mi último cumpleaños. Ese cumpleaños en el que mi amigo Juan se comió una enorme bandeja de Sandwiches para él solo y después de tremendo atracón, con una sonora flatulencia hizo temblar aquella lámpara blanca y amarilla que había en el salón.
O aquel otro cumpleaños, el primero de la casa de Conde De Vallellano, donde mi amiga Feli me regaló el cd de la Oreja de Van Gogh y María el peluche de Coco.... 
Creo que en esos cumpleaños cumplía 6 y 7 años respectivamente. Y no ha llovido desde entonces.
Aquel 18 cumpleaños tan especial, con esa fiesta "sorpresa" que no fue muy sorpresa pero que igualmente me encantó... 

Desde hace cuatro años celebro mi cumpleaños lejos de casa. Lejos de todas esas personas que, aunque ha llovido mucho, siguen estando ahí, siguen siendo las mismas. Y desde hace cuatro años ya, tengo la suerte de haber compartido este día con gente nueva, que poco a poco, se fue convirtiendo en mi gente de siempre. Una fecha mala en cuanto a celebraciones se refiere. El ser universitario te limita mucho en los meses de enero y febrero. Aunque esto casi no importaba en este día. He visto como mis compañeros de piso me hacían una "fiesta sorpresa de desayuno" (con carteles pegados incluidos), y como mi pequeña loca rubia se dejaba la piel para que el día fuera un poco más especial. Como mis padres y abuelos, han ido durante 3 años seguidos, a 150 km de distancia por solo tomarse un café conmigo. 
Porque yo soy de esas que esperan la felicitación de la gente que quiere, que aunque parezca una tontería, me gusta saber que se acuerdan de mi, al menos una vez al año. Y sí, cuando no llega la falicitación que quieres duele un poco... pero se palia con el cariño que si llega.

Y aquí estoy un año más, diciendo cua cua y dando mil gracias, por haberme dado todos esos momentos y ahora recuerdos.
Otro año a las espaldas, rodeada también de gente increíble, dispuesta a celebrarlo como se merece (como ellos merecen), en una ciudad que me deja sin aliento. Y porque aunque ellos estén de exámenes, somos chicos Erasmus y algo podremos hacer... 

La próxima entrada del blog os contaré como fue la celebración... (si me acuerdo de algo).

Un abrazo, 
Marta

3 comentarios:

  1. ¿Porque no fue sorpresa tu fiesta de los 18?¿ me lo cuentaS? ¬¬

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  2. tia no te acuerdas? os lo currasteis todos mucho.. pero mi abuelo lo solto en el almuerzo y yo me lo olí jajaja

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  3. ainss... sólo espero q para el del año q viene pueda disfrutarlo contigo. Felices patitoos! =)

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